Juana Simonetti, investigadora y radioaficionada, en una de sus comunicaciones experimentales diarias captó frecuencias de radio muy inusuales, por lo tanto se decidió a investigar más sobre ellas. La organización de Radioaficionados de Argentina le brindó la información y los equipos necesarios para dar con la localización de esta frecuencia y además para la grabación de los siguientes audios. Gracias a esto Juana pudo llegar al sitio desde donde se emitían estas señales y allí encontró rastros de una civilización completamente distinta a lo ya conocido; parecería ser que una estación de radiotelegrafía había quedado activa y estaba siendo presionada por algún insecto u animal que ahora habitaba ese espacio, ya que estos individuos ya no se encontraron en el lugar a la hora del hallazgo. Pero de acuerdo a una investigación, ellos utilizaban la telecomunicación durante el día, en el desarrollo de sus tareas administrativas, para el manejo y distribución de datos mediante el uso del código Morse.

A continuación se adjuntaran las grabaciones anteriormente mencionadas y los objetos encontrados durante la investigación:

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